COMUNICADO
Viernes 20 de Marzo de 2015
Desde SONAR Músicos Independientes de Córdoba, asociación civil sin fines de lucro, queremos llevar claridad a los músicos de la Provincia de Córdoba en cuanto a la mentada y mal intencionada publicación realizada por el SADEM (Sindicato Argentino de Músicos) el día Jueves 19 de Marzo en virtud del lanzamiento oficial del Banco de Música Nacional e Independiente creado por la FAMI (Federación Argentina de Músicos Independientes) de la cual formamos parte activamente.
Dada la notoria repercusión de dicha publicación, la cual concideramos irresponsable porque manosea la información con el sólo fin de confundir y reducir al músico en su libertad y capacidad de pensamiento, nos vemos en la obligación ética de accionar en virtud de los muchos músicos colegas y amigos, habitantes de la ciudad y de la provincia, con el objetivo de refutar dichas acusaciones con una suprema intención: dar explicaciones detalladas al respecto de este asunto y compartir la información indispensable que hace a nuestra actividad y profesión como músicos independientes y autogestionados:
1.- El SADEM (Sindicato Argentino de Músicos) es un sindicato que sólo tiene jurisdicción en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en algunos distritos de la Provincia de Buenos Aires, dado que su representación y personería jurídica (según su propia resolución) establecen este marco como ámbito territorial de acción. En nuestro país existen aproximadamente veinte sindicatos de músicos pero no están nucleados entre sí y cada uno posee personería jurídica en su ámbito territorial, por tal razón, los convenios y acciones que cada uno homologue no son de aplicación en el resto de las provincias o ciudades. En nuestra ciudad, y con personería jurídica en toda la provincia, existe el Sindicato de Músicos de Córdoba.
2.- El SADEM es el mismo sindicato que en el año 2006 promovía que TODOS los músicos populares e independientes del país estemos obligados a dar un examen de idoneidad que nos certifique como músicos para poder desempeñar la actividad en conciertos y presentaciones en vivo, que TODOS los músicos paguemos una matrícula obligatoria de $96 por año, y que TODOS los músicos cobráramos nuestro derecho de actuación a través de su administración previo descuento sindical. Esta situación fue repudiada por miles de músicos, no sólo en las asambleas en el Hotel Bauen con motivo de la Ley Nacional de la Música, sino también en todo el país. (ver VIDEO). Vale recordar e informar, para aquel que lo desconoce, que el ex presidente Néstor Kirchner reconoció noblemente, delante de muchos músicos presentes, que se había equivocado y que fue mal asesorado por representantes del SADEM, y dispuso la inmediata derogación del decreto que le daba al SADEM esa potestad. Acto seguido, nos invitó a desarrollar una Ley que mejore las condiciones en las que se hace música en la Argentina. Dicha ley es la Ley Nacional de la Música, construida colectivamente con aportes de casi todos los músicos del país, ley que crea el INAMU (Instituto Nacional de la Música) y que fomenta la actividad musical y que brindará herramientas reales para mejorar el trabajo de los músicos.
3.- La FAMI (Federación Argentina de Músicos Independientes) es una asociación civil sin fines de lucro, que nuclea a las diferentes asociaciones civiles con personería jurídica en la distintas provincias de la republica Argentina, y cuya misión es ser una herramienta más en la construcción colectiva de una nueva realidad para la actividad musical como profesión, apelando a la participación ciudadana y activa de los músicos en la conquista y expasión de sus derechos como hacedores de cultura, como artistas y como trabajadores.
4.- El Banco de Música Nacional e Independiente fue creado por la FAMI a partir de un convenio de cooperación firmado con la AFSCA (Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual), con el objetivo de generar una herramienta concreta que contribuya a cumplir con lo establecido en el Articulo 65 de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
Artículo 65 – Contenidos
1) Los servicios de radiodifusión sonora:
a) Privados y no estatales:
ii) Como mínimo el treinta por ciento (30%) de la música emitida deberá ser de origen nacional (1), sea de autores o intérpretes nacionales, cualquiera sea el tipo de música de que se trate por cada media jornada de transmisión (2). Esta cuota de música nacional deberá ser repartida proporcionalmente a lo largo de la programación, debiendo además asegurar la emisión de un cincuenta por ciento (50 %) de música producida en forma independiente (3) donde el autor y/o intérprete ejerza los derechos de comercialización de sus propios fonogramas (4) mediante la transcripción de los mismos por cualquier sistema de soporte teniendo la libertad absoluta para explotar y comercializar su obra. La Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual podrá eximir de esta obligación a estaciones de radiodifusión sonora dedicadas a colectividades extranjeras o a emisoras temáticas.
5.- Las asociaciones civiles con personería jurídica en las diferentes provincias y nucleadas en la FAMI serán las responsables de fiscalizar, certificar, digitalizar y subir al Banco de Música Nacional e Independientes los álbumes o discos editados en formato físico e industrial que sean independientes, esto es, aquellos cuyos derechos de comercialización de los fonogramas pertenezcan y permanezan en manos de los propios músicos.
6.- Todo músico que haya editado su material en formato físico e industrial tiene derecho a formar parte del Banco de Música Nacional e Independiente sin necesidad que sea socio de alguna de las asociaciones civiles, sin necesidad de que haya editado a través de los convenios de fabricación (replicación / imprenta) que estan sirven como beneficio, sin importar que sea absolutamente autogestionado, que forme parte de un colectivo de artistas o de los llamados “sellos independientes”. Sólo basta que esté editado en formato físico industrial según lo establece el marco legal que regula la música Argentina como propiedad intelectual en relación al derecho de autor. La sola observación de los títulos cargados actualmente en el Banco de Música Nacional e Independiente deja en evidencia la malintencionada publicación del SADEM en cuanto a la legítima procedencia de su contenido musical.
7.- La inclusión de un disco en el Banco de Música Nacional e Independiente es una desición libre del músico, pudiendo optar por no participar. Al mismo tiempo, los discos físicos, a pedido del músico, podrán certificarse como independientes a través de un sticker de identificación que les permite a las radios cumplir con lo establecido en el Articulo 65 utilizando el formato físico.
8.- Los discos que se suben al Banco de Música Nacional e Independiente no “representan” a ninguna asociación, son obras creadas y materializadas por los músicos en el ejercicio pleno de sus
derechos. Ni la FAMI (Federación Argentina de Músicos Independientes) ni UMI, ni SONAR, ni cualquiera de las demás asociaciones civiles que componen dicha federación son Sellos Discográficos, ni tienen vinculación societaria alguna con CAPIF (Cámara Argentina de Productores Fonográficos), ni participan del negocio discográfico como maliciosamente publicó el SADEM. Por el contrario, hoy nos encontramos dando pelea ante la arbitraria disposición de dicha entidad que pretende impedir que los músicos independientes cobremos el derecho como productores fonográficos de nuestras propias producciones. No es menor recordar que CAPIF representa los intereses de los sellos multinacionales (Sony Music, Universal Music, Warner Music) que poseen el 92% de la producción mundial de música, que dominan y estandarizan el consumo de música a través de sus “productos” artísticos, y que oportunamente se opuso a la Ley Nacional de Música y al contenido del Artículo 65 de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
9.- La tarea de fiscalización de discos y su inclusión en el Banco de Música Nacional e Independiente es una responsabilidad legal y un trabajo infinito que SONAR, como las demás asociaciones civiles que conforman la FAMI, asumimos con absoluta vocación de servicio sin remuneración alguna, entendiendo que los derechos conquistados en estos últimos años en materia de música nos pertenecen a todos, y es la acción colectiva el único medio posible para hacer de la actividad musical una realidad próspera, diversa, inclusiva, y redituable. Nos apena el egoísmo que intenta invisibilizar el crecimiento paulatino que se genera por el esfuerzo mancomunado de cada conquista en materia de derechos, porque no se trata de protagonismos individuales sino de logros colectivos. Lo importante no son los nombres ni los hombres sino el cambio en la realidad del conjunto de músicos que todos los días construyen nuestra identidad cultural como país.
SONAR
Músicos Independientes de Córdoba
“Todos los hombres somos música”